Fotografía por Juliana Martínez en entrevista para Unisabana Medios.
Es periodista de investigación y cubre temas de medio ambiente, conflicto armado y población indígena. Es becaria del Pulitzer Center, consultora de Environmental Investigation Agency y capacitadora en periodismo y narrativas digitales.
Es directora y editora del medio independiente Agenda Propia, que promueve el periodismo colaborativo intercultural y le apuesta de manera permanente a hacer historias periodísticas sobre la realidad de los pueblos indígenas en Colombia y América latina.
Nos contó:
Sobre la desaparición de historias...
• En América latina hay 800 pueblos indígenas. Son 800 formas distintas de narrar en los territorios y es importante empezar a comprender de manera urgente esa diversidad. Hay pueblos en los que tan solo quedan poblaciones de menos de 100 habitantes y están en alto riesgo de exterminio físico y cultural. Adicional, la emergencia climática y la deforestación están acabando con los bosques, su hábitat natural.
• Hemos ido a hacer historias en la Amazonía, por ejemplo, donde los abuelos y abuelas nos decían que allí antes se escuchaba una especie de ave, había un pez o había un animal y que ya no está ese animal porque han entrado mineras, porque han entrado petroleras o porque la crisis climática está cambiando esos sonidos.
• El llamado de urgencia a los periodistas es que debemos empezar a cubrir estos temas, pero no solo desde la mirada de periodistas no indígenas, como mi caso, sino también de periodistas indígenas. Yo creo que términos como ecocidio o genocidio se están presentando, se están evidenciando, no solamente en América latina, sino en distintos pueblos del mundo.
Sobre la autonomía de los relatos...
• Ya dejemos el discurso retórico de que hay voces invisibilizadas que no narran, que no se cuentan. El periodismo tradicional no va a estas comunidades. Es momento de cambiar e ir a ellas y hacerlas más participes en ejercicios de co-creación de historias, de reportajes, de crónicas, de documentales, de series fotográficas.
• Creo que es importante cambiar el modelo; primero, para reconocer que los pueblos indígenas son autoridades en sus territorios y, segundo, para permitir que haya más diversidad de voces en las historias. Nosotros desde Agenda Propia estamos promoviendo, justamente, que las historias se cuentan desde esa espiritualidad de los pueblos, desde las realidades que pasan en las comunidades y que sean las propias comunidades las que hablen.
Fotografía por Juliana Martínez en entrevista para Unisabana Medios.
Sobre otra forma de contar las historias...
• Hay que investigar usando distintas técnicas, distintas narrativas de periodismo, investigación tradicional, pero también la narrativa de la vida, la narrativa de la esperanza, la narrativa de la resistencia. Es justamente a lo que los pueblos indígenas nos invitan: a que contemos desde esa narrativa de esperanza lo que está pasando.
• Creo que el trabajo periodístico que se hace reposado, que se hace la mano con las comunidades, permite hacer memoria y permite dignificar la realidad de los pueblos indígenas. Permite, además, reconstruir procesos de historias que no van a servir para el momento mediático del día a día, sino que van a ser memoria oral para las comunidades.
• En este ejercicio de memoria hay que pensar en formatos narrativos. Nosotros estamos promoviendo cada vez más el corto documental, la fotografía documental, el podcast, los sonidos, porque así se pueden contar esas historias y se puede hacer memoria. Por ejemplo, estamos intentando implementar e incluir en las historias las lenguas indígenas. Es cómo se escuchan esas lenguas porque están en riesgo de desaparición.
Sobre un legado para los medios...
• Agenda Propia, del que soy confundadora, es un medio que nació desde el desde el departamento del Cauca y empezó a abrir un poco su trabajo en América latina justamente reconociendo ese llamado de urgencia que hacen los pueblos indígenas al periodismo y a los medios de comunicación.
• Tenemos un método que se llama Periodismo colaborativo intercultural. Son 8 fases de trabajo colaborativo e iniciamos con un círculo de la palabra y ahí empieza una escucha con líderes, lideresas, sabios, sabias, comunicadores... Ahí nos cuentan el contexto y en ese contexto hay memoria.
• Estamos impulsando la voz oficial de las historias que tienen que tienen que ver con pueblos indígenas. Desconocemos como medio de comunicación en nuestra agenda editorial a la fuente oficial: como el alcalde, el gobernador del departamento, el político de turno, el comandante de la Policía... pero sí reconocemos como las voces oficiales en nuestras historias a los gobernadores indígenas, a los guardias indígenas, mujeres, sabios, sabias, abuelas y abuelos.