top of page

Ricos en plástico, pobres en agua y fauna

pulzo.jpg

Paula Andrea Espeleta Chaya, Comunicación Social y Periodismo

Fecha:

La cantidad de plástico que llega a los océanos y mares es escalofriante, pero los seres humanos no estamos dispuestos a hacer mucho por cambiar la situación.  

Lea también:
Chía, un municipio que se hunde en su propio lodo
Ricos en plástico, pobres en agua y fauna
Foto:
Unsplash

En el mundo se producen al año aproximadamente diez millones de toneladas de basuras que acaban en océanos y mares, de las cuales, ocho millones de toneladas son plástico. China, Filipinas, Tailandia, Vietnam e Indonesia son los responsables del 60% de los desperdicios que se arrojan a los océanos. ¿Es justo que los animales marinos se vean afectados por el consumismo desmesurado de los seres humanos? Increíble es ver cómo el sistema nos hace tan ciegos a tal punto de no poder apreciar que la vida marina vale más que una botella de plástico.


La producción de este material que enriquece a grandes compañías produce un daño profundo en la fauna marina; sin embargo, para los seres humanos, que somos tan “sensatos”, es más importante nuestro propio bienestar que el de otras especies indefensas y perjudicadas por nosotros mismos. Los depredadores y salvajes marinos, que en este caso no serían ni los tiburones ni las orcas, somos, en este momento, los seres humanos. No nos estamos dando cuenta de que estamos acabando con la maravillosa creación de un ecosistema que nos ha brindado tantas cosas bonitas.


La cantidad de plástico en los océanos es cada vez más grande. Según World Economy Forum, en el 2050, los océanos contendrán más plástico que peces. ¿Cuánto tiempo más tiene que pasar para que la humanidad entera se dé cuenta de que si seguimos utilizando el plástico a grandes escalas las próximas islas que tendremos que visitar en nuestras vacaciones serán las islas repletas de plástico?


La vida marina se enfrenta a un "daño irreparable" por los millones de toneladas de desechos plásticos que terminan en los océanos cada año, advirtió Naciones Unidas. El plástico puede destruir un ecosistema que refleja una creación asombrosa. Según la BBC News, en el 2050 habrá aproximadamente 12.000 millones de toneladas de basura plástica en el océano. Esto demuestra que este fenómeno se ha convertido en un monstruo difícil de controlar, refleja que se ha transformado en una situación que se le salió de las manos a la humanidad; por esto, tenemos que ser conscientes de lo que estamos causando al usar plástico.


Es necesario un cambio de hábitos en nuestras vidas. Según el ART Surfcamp, aproximadamente 1 millón de bolsas de plástico se utilizan cada minuto, mientras que una sola bolsa de plástico puede tardar unos 1.000 años en degradarse. Debido a esto, es necesario que las personas se concienticen de llevar bolsas de algodón cuando realicen alguna actividad que lo requiera, esto con el fin de disminuir el uso de plástico y contribuir con el planeta.


En Colombia, la situación no es muy esperanzadora que digamos. Según El Espectador, al año se procesan 910.00 toneladas de plástico, esto demuestra que el consumo de cada habitante es cercano a los 20 kg., con esta realidad expuesta, nos damos cuenta de que nosotros también somos partícipes, en gran medida, de todo aquello que le está pasando a nuestro planeta.


En conclusión, la utilización de plástico tiene consecuencias que repercuten en el daño del ecosistema marino y sus especies. La disminución de este material en la vida humana ayudaría a la conservación de los océanos y demás lugares que están siendo afectados. Es necesario un cambio de mentalidad para que así se cree una conciencia a favor del medio ambiente. Diferentes grupos, como por ejemplo Greenpeace, hace que la reflexión hacia nuestro entorno se vuelva más global y tenga un mayor impacto. Las diferentes maneras de contribuir con el planeta empiezan desde nuestro mismo hogar, así se logrará que un cambio a gran escala se pueda llegar a pensar. La utilización desmesurada de este material ha causado daños irreparables en el ecosistema marino, sin embargo, todavía tenemos la oportunidad de demostrar que la humanidad es lo suficientemente inteligente para no seguir avanzando con este gran problema y llegar al punto que se pueda convertir en un asunto resuelto.

bottom of page